El jade es una piedra semipreciosa, venerada durante milenios por los emperadores y emperatrices chinos. Con sus matices de verde, este precioso mineral siempre ha fascinado a las civilizaciones gracias a sus numerosas virtudes.
Color |
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Verde mar a verde esmeralda |
Composición |
Silicato de aluminio y sodio doble con fórmula NaAl(SiO6). |
Dureza |
6-7 Mohs (relativamente duro) |
Ubicación |
Los principales yacimientos se encuentran en Birmania, China, Canadá y Nueva Zelanda. |
chakras |
Corazón y tercer ojo |
Signos astrológicos más sensibles |
Aunque cualquiera puede lucir jade, los signos más sensibles son: Acuario, Capricornio, Géminis, Tauro, Cáncer. |
La piedra de jade se compone principalmente de dos tipos de minerales: jadeíta y nefrita. La jadeíta se considera la más preciosa y rara de las dos variedades (cuando es de un verde esmeralda transparente se le llama “jade imperial”). La piedra de jade también se puede encontrar en otros colores, como blanco, negro, morado y naranja.
Símbolo de suerte y prosperidad
El jade a menudo se considera una piedra de la suerte, capaz de atraer suerte, prosperidad y oportunidades positivas a la vida de quienes lo usan. A menudo se utiliza en prácticas de manifestación y visualización.
Símbolo de longevidad y vitalidad
El jade se asocia a menudo con la longevidad, la salud y la vitalidad. Se dice que fortalece el sistema inmunológico, estimula la regeneración celular y proporciona energía revitalizante al cuerpo. Promueve el bienestar físico y la buena salud en general. En la antigüedad, las emperatrices chinas utilizaban rodillos de jade para preservar su capital juvenil.
Símbolo de honestidad y virtud
En algunas culturas, el jade se considera un símbolo de honestidad, virtud e integridad moral. Encarna cualidades positivas como la justicia y la rectitud, y a menudo se utiliza como recordatorio para mantener una conducta ética.
El jade se asocia con el crecimiento espiritual, el despertar y la expansión de la conciencia. Promueve la autoexploración, el desarrollo espiritual y fortalece las conexiones con el mundo espiritual. Ayuda con la meditación y promueve la paz interior. Es una piedra protectora que aleja las energías negativas y trae suerte y prosperidad.
La piedra de jade también se utiliza en prácticas de curación y bienestar. Se suele utilizar para masajes faciales, de cuello y corporales, ya que favorece la circulación sanguínea, relaja los músculos y rejuvenece la piel. El contacto con la piedra de jade puede ayudar a equilibrar la energía del cuerpo y estimular los órganos internos.
Para purificar y recargar una piedra de jade, puedes utilizar los siguientes métodos:
La piedra jade es una gema de excepcional belleza que posee profundas virtudes y significados simbólicos. Ya sea en el campo de la espiritualidad, la curación o la protección, esta piedra preciosa es un verdadero tesoro que sigue fascinando a personas de todo el mundo.
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